Padrenuestro
Es la oración que nos enseñó el mismo Jesucristo:
Padre nuestro, que estás en los cielos,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal.
Amén.
Avemaría
En ella repetimos muchas veces las palabras del Ángel y de Santa Isabela la Virgen María y las que le han dicho los buenos hijos de la Iglesia desde hace veinte siglos:
Dios te salve, María;
llena eres de gracia;
el Señor es contigo;
bendita Tú eres entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte,
Amén.
Gloria
Es un canto de alabanza dirigido a la Santísima Trinidad:
Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en un principio
ahora y siempre,
por los siglos de los siglos.
Amén.